SEMBRANDO JUSTICIA Y LIBERTAD
SEMBRANDO JUSTICIA Y LIBERTAD
Cada día
es una oportunidad para renacer, para reconstruir, para mejorar, y de vida para
cuidar, a veces de nosotros mismos, que caemos en “nimiedades” pero con
secuelas espeluznantes; y me refiero a circunstancias donde se cruza la delgada
línea en la que pudiendo hacer el bien se omite, como cuando se justifican
hechos como el que les voy a detallar.
Cuantas
veces se escucha “esto es una mentira piadosa o blanca”, como si faltar
a la verdad, que es uno de los actos más infames cometidos por los seres humanos
pudiera asignársele color; lo cierto es que la mendacidad y sus consecuencias
son funestas y en muchos casos fatales.
(le puede interesar El honor de los jueces)
Tal vez
cuando alguien decide el espinoso camino de faltar a la verdad - sin importar
la motivación – probablemente no hace el cálculo de lo complejo que es mantener
un engaño, y que detrás de uno necesariamente irá otro, y otro más; hasta que
todo termina revelándose, en muchos casos con un desenlace que podría evitarse,
pues muchos de estos inventos terminan convertidos en falsos testimonios, y
esto se traduce a la posibilidad de más de una década de vida en
prisión.
Las
huellas que dejan son prácticamente imborrables, el daño a vidas y familias,
parece incurable, y a veces ha sido ineludible para quienes por esto han
perdido su libertad, pues estas conductas terminan poniendo a sus víctimas en
el ojo de huracán, engrosando la lista de fabricación de culpables, y no todos
llegan a un final feliz.
Hoy mi
reflexión está dedicada a los victimarios, para que puedan
liberarse; y después de causar tanto daño, más allá de pedir perdón, cuenten la
verdad, acudiendo ante el sistema judicial colombiano haciendo uso de las
herramientas que han dispuesto y que quizá muchos ignoran que aún habiendo
cometido este acto delictivo, pueden reparar el daño que causaron, aceptar los
cargos y así tener una rebaja de pena, incluso consultar con sus abogados si en
cada caso concreto, pueden aplicar un principio de oportunidad,
y en el mejor de los casos recibir una especie de inmunidad.
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Las
víctimas siempre esperan la verdad, pero ella trae un efecto reparador en doble
vía, Jesús dijo "entonces conocerán la verdad, y la verdad los hará libres» Juan 8:31, cuánta razón y sabiduría
en esta enseñanza.
Defensora de Derechos Humanos
